15/02/10. Christchurch

Por fin llegamos a Nueva Zelanda tras dos vuelos eternos de Frankfurt a Seul y de Seul a Auckland. El vuelo hasta Auckland duró 11 largas horas, en las cuales Jorge y yo decidimos arriesgarnos con comida de avión "típica coreana". Y vaya si era peligroso, ya que el bibimbap no estaba demasiado bueno. Se trata de arroz cocido, con verduras, aceite de sésamo y salsa picante. En pleno vuelo mezclas todos los ingredientes e intentas comértelo, y solo decir que Jorge fue incapaz de terminárselo.

Ya en Auckland teníamos que coger el último avión hasta Christchurch donde llegamos a las 14 horas del lunes día 15, después de 4 aviones, dos días de viaje y unas 7 horas de sueño en el aire.
Y llegaba la primera prueba: conducir por la izquierda. Teníamos alquilado un NISSAN PULSAR, coche que nunca llegará a España porque hace tiempo que dejó de fabricarse, pero que parece fue muy popular en esta parte del mundo.

No fue fácil llegar hasta el Bed&Breakfast ya que en Nueva Zelanda los conductores no son muy pacientes, y nos pusieron en algunas dificultades.
Nuestra noche en Christchurch la pasamos en Eliza's Manor on Bealy, un B&B clásico, muy agradable y con mucha solera: escalera de madera, piano, alfombras gruesas y mucha historia.

La propietaria nos recomendó un paseo por Christchurch para intentar adaptarnos al horario neozelandés y así además relajarnos después del viaje. Seguimos su consejo y nos dio muy buen resultado, ya que aunque esa tarde fue muy dura y parecíamos dos zombis por la ciudad, no hemos tenido problemas con el jetlag.
De Christchurch poco puedo decir, salvo que es una ciudad tranquila donde todo está hecho a imagen y semejanza de una ciudad inglesa, con un agradable río y  gran número de parques y jardines.

Visitamos el precioso jardín botánico y luego fuimos a restaurante Dux de Lux, muy famoso entre los turistas y con una buena relación calidad-precio. Se trataba (cerró tras el último gran terremoto) de un restaurante vegetariano y de marisco donde comimos pizza napolitana, ensalada cesar de salmón y kumara frita (la kumara es un tubérculo propio de Nueva Zelanda que se prepara igual que las patatas pero tiene un sabor más dulce). La comida en Nueva Zelanda es bastante buena y a un precio muy razonable. Tienen una gran materia prima, y aunque los restaurantes en los que hemos estado son informales, presentan los platos de una manera muy cuidada. Ademas la cerveza está bastante rica, y aunque el vino tiene mucha fama es un poco más caro.
Nuestro primer día en Nueva Zelanda resultó duro y poco excitante, físicamente estábamos destrozados, pero con la ilusión de que el día siguiente nos trajera todo lo esperábamos de este viaje.

Comentarios

  1. Pues si Jorge no pudo terminárselo, ya debía de estar malo...

    Sabéis? Os imagino a los dos arrastrando los pies por el suelo y tu diciendo: "Jorgiiiii, tengo sueñooooo!"

    Besazos!

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  2. Vanesa, para el blog menos papeo y más fotos depaisajes y sobretodo cuéntanos sobre los lugares frikis de culto!!!! Que parece un blog de gastronomía jajajajajajaja!!!!!!!!!!! Pasadlo muy bien. Un beso y aguantad boca abajo todo lo que podais ;-)

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  3. Para cuando un video con el remolino del Wc?

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  4. Eso, eso!!! Lo del WC nos lo prometísteis... ah, una cosa, es preberible que no haya un mojón de por medio, cuando tiréis de la cadena, ok?

    Besos y abrazos!

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  5. Joder Sirkesh estaba pensando exactamente lo mismo!!!! Que Vane se nos viene arriba rápido con el tema jajajajajaja.

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