19/02/10. Kawarau

El día 19 teníamos por delante una ruta en coche desde Te Anau a Wanaka, con parada obligada en Queenstown. Si bien fue un día menos espectacular en cuanto a paisajes que los anteriores, nos enfrentábamos a un gran reto ...el KAWARAU.
Cuando nos planteamos ir a Nueva Zelanda no pensábamos, ni mucho menos, en tirarnos por un puente. Pero un día surgió la idea y ya no podíamos echarnos atrás sin parecer cobardes: que si el puenting se inventó en Nueva Zelanda, que si fue en un puente sobre el precioso Kawarau, que si allí se rodó parte del  Señor de los Anillos.
Por eso llegamos a Queenstown con tres objetivos:  una breve parada para un segundo desayuno en la capital mundial del deporte de aventura, conseguir usar WIFI gratis y pedir cita para el Salto.
Queenstown es una ciudad agradable entorno al lago Wakatipu, hay mucha gente joven en cafes y terrazas, muchos de ellos mochileros, y proliferan también un montón de oficinas que venden las actividades más extrañas: lanchas rápidas por cañones, tirarse desde casi cualquier alto atado de una cuerda, bajar una ladera dentro de una pelota de plástico etc.
Nosotros nos dirigimos al CAFE PATAGONIA, recomendado en la Lonely y con WIFI gratis. Allí Jorge decidió pedir como segundo desayuno unas milhojas rellenas de chocolate y caramelo.
Nuestro futuro estaba decidido...fuimos a la oficina de AJ Hackett Bungy para realizar el booking. El río Kawarau tiene una bonita garganta muy cercana a Queenstown donde se localizaron algunas escenas del Señor de los anillos, y cuenta con varios puentes, desde uno de los cuales un señor muy gracioso inventó el BUNGY ( o puenting en España). En Nueva Zelanda hay sitios mucho más altos desde los que tirarse, algunos tan emblemáticos como el Kawarau (por ejemplo el Sky Tower), pero nosotros estabamos decididos, era el momento y el lugar.
Tras llegar a la base de operaciones de AJ Hackett Bungy en el Kawarau, nos pesaron y nos apuntaron la medida en la mano ( ¿Para identificar nuestros cuerpos cuando los recogieran del río?).
La cosa estaba decidida, yo saltaría primero mientras Jorge tomaba unas imágenes desde la barrera. Sinceramente yo prefería saltar cuanto antes y no esperar mi turno mordiéndome las uñas. Nunca he tenido mucho miedo a las alturas y siempre me ha gustado tirarme al mar desde varios metros de altura, por lo cual  no pensaba que el puenting fuera a costarme demasiado.Me ataron las piernas y dando saltitos me colocaron en el borde de una  plancha de madera, pero era yo la que debía tirarse al vacío. Este es el momento culminante, el ser o no ser, saltar o no saltar...y como ya había pagado el pastizal que vale el bungy, y yo soy un poco pesetera, me tiré.
La caída y el movimiento pendular es divertidísimo, breve pero divertido, pero el saltar fuera de la plataforma es dificilísimo, cuando estas al borde del abismo. UN SALTO DE FE (fe en que los guys de las cuerdas han hecho esto miles de veces y no la van a cagar justo ahora).


Yo no me mojé porque así se lo pedí a los chicarrones que controlaban el salto. 
Hay que señalar que se tira muchísima gente, pero que aún es mayor la cantidad de personas que paran en el Kawarau única y exclusivamente para ver caer a los más intrépidos.
Jorge si que metió todo el cuerpo en el agua, y su salto fue muy aclamado por el público que había en el río, aunque no se puede apreciar en el vídeo dadas mis escasas dotes como cámara.
 

Tras este subidón de adrenalina continuamos camino hacia Wanaka, pero decidimos parar primero en Arrowtown, un antiguo pueblo minero muy turístico. Allí comimos unos estupendos pasteles de Venado y Pollo en Arrowtown Bakery.
Wanaka está  al borde de otro impresionante lago y es también un buen punto de partida para visitar al Parque Nacional del Mt Aspiring y parece que en invierno es un importante centro de esquí.
Nuestro alojamiento fue en un pequeño chalecito, muy coqueto, en Te Wanaka Logde, y la cena maravillosa en RELISHES: Atún fresco y Entrecot de ternera (Ribeye steak), quizá la mejor cena que hemos tomado en Nueva Zelanda.

Ruta Te Anau -Wanaka 227 km.

XOXO

Comentarios

  1. Vanesa tu salto se da más un aire a la pasarela del barco de Barbanegra... si el "guy" te está empujando hasta el borde jajajaja!!!! Y a ver si para el próximo salto sigues el vuelo del Jorge que es una pena no verle entrar en el agua!!!

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  2. J, esto sólo sirve para remover un poco más la mierda, pero tienes razón: ¡¡¡¡ES UNA PENA NO VERME ENTRAR EN EL AGUA!!!!

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  3. Bueno, más bien el salto de Vane parece el del angel... caído! Decir que tienes un par de pelotas. Yo no lo hubiera hecho, ya te lo digo.

    Abrazos!

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  4. Jorge sin embargo realizó un video estupendo, donde en todo momento aparezco en plano.

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  5. ¿Seguro que Jorge entró en el agua?..¿no será un montaje?.....

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  6. Si, es un video montaje, y después me eché por encima un barreño de agua para hacerme la foto que a Vanesa no se le ha ocurrido poner...

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