Londres, día 1 (por Afu)
El primer día tocó levantarse pronto. El vuelo salía a las 07:30, y había que estar un rato
antes, aunque no teníamos que facturar maletas.
El vuelo con easyjet fue muy bueno, todo sobre el horario
previsto. Llegamos a las 08:55. Como el minibús con easybus no lo
teníamos hasta las 10:05 aprovechamos ese tiempo para comprar las LondonPass en
el mostrador de turismo del mismo
aeropuerto (61,7€ cada uno para un día).
El autobús nos dejo junto a la parada de metro de West Brompton,
a unas pocas estaciones de nuestro
hotel. El easybus es una opción muy recomendable, por poco más de 11€ hicimos
la ida y vuelta del aeropuerto al centro de Londres. Tiene varias
paradas en Londres, cada una con un autobús diferente, por lo que es importante
confirmar con el conductor dónde va. Es recomendable comprar los billetes por
internet para asegurarse un sitio y un precio más barato, aunque cuando lo
cogimos nosotros fuimos con tres personas a la ida y solos a la vuelta.
El hotel Rhodes está muy bien comunicado, junto a dos paradas importantes: Paddington y
Lancaster Gate. Es una buena opción para pasar unos días en Londres,
junto a Hyde Park, y se puede llegar andando a un gran número de lugares de
interés: Buckingham palace, Oxford
Street, Little Venice, Nothing Hill,… Las
habitaciones muy limpias y con todo lo indispensable.
La doble un poco pequeña,
pero suficiente. Para la triple nos pusieron en una de cinco camas, así que
enorme. En cuanto, al trato del
personal, excepto un recepcionista, el resto (recepcionistas y personal de la
cocina) encantadores.
A las 12:00 ya habíamos dejado las maletas en una de las
habitaciones, porque la otra la estaban preparando. Así que nos pusimos en
marcha para aprovechar nuestro primer día en Londres. El hotel, como he dicho, se encontraba junto
a una de las entradas de Hyde Park, así que decidimos ir andando, atravesando
el parque, hasta nuestro primer destino el Museo de Ciencias Naturales. El paseo hasta allí
fue precioso, vimos la estatua de Peter Pan en Hyde Park, el Albert Memorial y el Royal Albert Hall por fuera.
Necesitamos como unos 30-40 minutos para hacer el recorrido con calma, haciendo muchas fotos.
En cuanto al Museo de Ciencias Naturales, totalmente recomendable, aunque sólo sea por ver el edificio, por fuera y por dentro. Además la entrada es gratuita!!!! (como todos los museos de Londres). Como no teníamos mucho rato, hicimos una visita rápida, pero si vuelvo a Londres, será uno de los lugares a los que vuelva.
De allí nos dirigimos al museo Victoria and Albert , que está muy cerca. Sobre todo para tomar algo en la cafetería, de la que había leído muy buenas críticas en internet. Pero estaba llenísima así que fue imposible. Así que nos dirigimos en metro a nuestro siguiente destino el British Museum. Antes de entrar nos tomamos algo rápido en un Starbucks frente al museo, para así tener al menos 1 hora y media para visitarlo. Nos dio tiempo a ver la zona egipcia, griega, romana y asiria. Otro de los sitios que uno no se puede perder al ir a Londres, aunque con un poco más de tiempo.
Para terminar el día dimos otro pequeño paseo hasta la zona de Covent Garden, el mercado cubierto. Aunque es bonito, yo lo recordaba más espectacular de mi primera visita a Londres, a lo mejor es porque no había mucho ambiente al ser un jueves. Cerca de allí nos tomamos unas pintas, yo una sidra, en el pub Flang and Lamb, muy típico, eso sí bastante concurrido. No recuerdo cuanto nos costó la pinta, pero no me pareció especialmente caro.
Necesitamos como unos 30-40 minutos para hacer el recorrido con calma, haciendo muchas fotos.
En cuanto al Museo de Ciencias Naturales, totalmente recomendable, aunque sólo sea por ver el edificio, por fuera y por dentro. Además la entrada es gratuita!!!! (como todos los museos de Londres). Como no teníamos mucho rato, hicimos una visita rápida, pero si vuelvo a Londres, será uno de los lugares a los que vuelva.
De allí nos dirigimos al museo Victoria and Albert , que está muy cerca. Sobre todo para tomar algo en la cafetería, de la que había leído muy buenas críticas en internet. Pero estaba llenísima así que fue imposible. Así que nos dirigimos en metro a nuestro siguiente destino el British Museum. Antes de entrar nos tomamos algo rápido en un Starbucks frente al museo, para así tener al menos 1 hora y media para visitarlo. Nos dio tiempo a ver la zona egipcia, griega, romana y asiria. Otro de los sitios que uno no se puede perder al ir a Londres, aunque con un poco más de tiempo.
Para terminar el día dimos otro pequeño paseo hasta la zona de Covent Garden, el mercado cubierto. Aunque es bonito, yo lo recordaba más espectacular de mi primera visita a Londres, a lo mejor es porque no había mucho ambiente al ser un jueves. Cerca de allí nos tomamos unas pintas, yo una sidra, en el pub Flang and Lamb, muy típico, eso sí bastante concurrido. No recuerdo cuanto nos costó la pinta, pero no me pareció especialmente caro.
Como ya estábamos cansados y con mucha hambre, decidimos ir
a cenar al barrio chino. Cenamos en un buffet libre llamado Mr Wu, pero cuidado
no os pase como a nosotros, porque hay dos muy cerca. Nosotros fuimos porque había leído criticas estupendas en
internet. Así que vimos uno y nos metimos. Nos pareció un poco cutre, sobre
todo muy pequeño, con las mesas amontonadas. Pero nos arriesgamos. La variedad
no era mucha, pero si era barato 6,95 libras cada uno, a parte la bebida (eso sí, no venden bebidas
alcohólicas). No cenamos mal, pero tampoco nada remarcable. Nada más salir y de
camino al metro nos encontramos con el verdadero Mr Wu, un local mucho más
grande y con mejor aspecto, también con más variedad, pero un poquito más caro,
creo unas 8,95 libras el buffet.
Al ir a coger el metro vimos un espectáculo muy chulo de
luces y música junto a la parada de Leicester Square. Fue nuestra última
experiencia, antes de irnos a dormir prontito. Había sido un día intenso y el
siguiente prometía ser duro.
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