Cantabria y Asturias. Verano 2016

El norte de España no nos cansa, podríamos volver a la zona occidental de Cantabria mil veces, y seguiríamos disfrutando. Hemos pasado allí quince días en agosto de 2016. Unquera no es el pueblo más bonito de la zona, sin embargo el entorno es fabuloso, y está estupendamente comunicado.

Hemos viajado con los niños y cada día hemos hecho alguna actividad:

1. Playas.
Las playas son maravillosas, de las más bonitas de España y del mundo. Si bien es cierto que la mayoría son pequeñas y el acceso no es fácil. Nuestras preferidas son:

Buelna (Asturias). Pequeña playa protegida de las olas, hay alguna plaza de aparcamiento en la misma playa, pero también se puede aparcar en el pueblo de Buelna. Cerca está el Cobijeru, una playa interior.
Playa Buelna, Asturias

Prellezo (Cantabria). La playa de Berellón es una preciosa ensenada, con un arco de piedra al fondo, rodeada de árboles. Cuando el oleaje es fuerte, y la marea está alta, puedes bañarte sin peligro ya que está muy resguardada. Con marea baja hay metros y metros de arena donde jugar.
Hay un aparcamiento gratuito a 1km de la playa, y es necesario bajar por la carretera para llegar a la arena. Con niños pequeños merece la pena bajar hasta la playa, descargar, y luego dejar el coche en el aparcamiento. Hay duchas y un chiringuito en la hierba, con unas vistas espectaculares.
Playa de Prellezo, Cantabria.
La Franca (Asturias). Más grande que las anteriores y con mejor acceso. Hay un hotel y dos campings cerca de la orilla. Con marea baja pueden explorarse numerosas cuevas. Es una playa preciosa, más convencional que las anteriores, pero también más cómoda.


Cueva, playa de La Franca, Asturias
Pechón (Cantabría). Es la más abierta al oleaje y, aunque tiene varios aparcamientos, la bajada final a la playa es un poquito incómoda. Pero las vistas son estupendas, y según baja la marea una lengua de arena queda al descubierto y une la orilla con un islote rocoso.

Hay  playas más amplias y con mucho encanto, donde es habitual que se realicen cursos de surf, como en San Vicente de la Barquera y Oyambre. Y otras muchas de pequeño tamaño... en general cuanto peor acceso menos gente. Y el agua siempre muy fría.

2. Planes con los niños
El primer domingo nos levantamos con lluvia, y decidimos acercarnos a Santander, al museo marítimo. Somos muy madrugadores y llegamos a primera hora, con el museo prácticamente vacío. Lo más interesante para los peques fue el acuario.
A las 12:00 un submarinista daba de comer a los tiburones, era muy entretenido pero para entonces había una multitud en el acuario. (Entrada normal 8€, menores de 5 años no pagan).
Acuario, Museo Marítimo de Cantabria, Santander
Acuario, Museo Marítimo de Cantabría, Santander.
Neocueva de Altarmira
Nos levantamos muy pronto para estar en Santillana del Mar a las 09:30, hora en la que abrían el museo, pero a esa hora había ya una cola tremenda en las taquillas, y es que Cantabria estaba llena de gente el pasado agosto. Tras 1 hora y media de espera, cogimos entradas para una visita a la neocueva no guiada (3 € los adultos). Los niños disfrutaron mucho de la museoteca, una sala de actividades para ellos.

Fuente Dé.
Otro intento infructuoso de subir al funicular. Madrugamos pero no llegamos a Fuente Dé hasta las 10 y media (hay más de 90 minutos de coche desde Unquera),y para entonces ya no había entradas hasta por la tarde. Tomamos un café en el Parador y los niños jugaron en los columpios. Había muchísima gente, por lo que nos volvimos a casa. Justo antes de llegar, paramos a hacer picnic en un merendero junto al Río Deva en Molleda.

Paseo de las Secuoyas.
Cerca de Cabezón de la Sal hay un pequeño bosque de secuoyas. Es bastante espectacular y una agradable visita con los niños. (gratuito).
Bosque de Secuoyas, Cabezón de la Sal, Cantabria

Cueva del Soplao.
Bonitas cuevas geológicas, donde es mejor reservar con antelación. El tren no funcionaba pero aún así los pequeños disfrutaron mucho de la visita. No se puede pasar con carro.

Zona de la cueva del Pindal.
En la cornisa cantábrica abundan las cuevas con pinturas rupestres y, además de Altamira, cerca se pueden visitar las de Tito Bustillo, las del Castillo, las del Chufín y las del Pindal. Las del Pidal están al lado de Unquera, pero los niños menores de 7 años no pueden entrar. Sin embargo toda la zona es preciosa, hay unos bellísimos acantilados que merecen la visita.

Acantilados, Pimiango, Asturias.

Acantilados, Pimiango, Asturias.
Bufones de Arenillas.
Muy cerca de Puertas de Vidiago (Asturias), hay una ruta hasta los bufones de Arenillas. Para disfrutarlos mejor: con marea alta y grandes olas. El ruido es atronador y los pequeños pueden asustarse.

Bufones de Arenillas, Puertas de Vidiago, Asturias
Paseo por Colombres.
Además de pueblos marineros y pueblos de montaña, en la zona hay pueblos cuya característica más destacable son los edificios de estilo indiano. El más conocido es Colombres, que tiene un museo dedicado a la migración de asturianos que se produjo a final del siglo XIX y principio del XX.
El Camino de Santiago  atraviesa este pueblo, de hecho desde Unquera se puede llegar a Colombres por el Camino, subiendo una cuesta de apenas un kilómetro, atravesando previamente Bustio, otro pueblo asturiano con alguna mansión indiana muy bonita.

Museo de Indianos, Colombres, Asturias
Hay muchas más actividades interesantes en la zona: visitar San Vicente de la Barquera, Comillas, Potes o Llanes, Bajar en piragua el Río Deva, hacer la ruta fluvial por el Nansa o acudir al mercado anual de Val de San Vicente. Es difícil aburrirse.

3. Comer algo....
Venir a esta zona conlleva, entre otros, el placer de la comida. Nos encanta un restaurante de Caviedes que se llama Casa Cofiño, pero este verano resultó imposible reservar. Con los niños salimos poco a comer fuera pero estas fueron algunas de nuestras experiencias:
  • Casa Samuel, restaurante tradicional de Unquera donde todos los días tienen un menú estupendo. Destacan los platos de cuchara.
  • Los Toneles. Nuevo restaurante de Unquera con ambientación astur-cantabra. Muy rico todo, muy recomendables las tablas de queso, con Estrella Galicia muy fría.
  • Casa Poli. Famosísima sidreria en Puertas de Vidiago. El edificio es una casona antigua con un gran patio, no reservan pero a las 8 de la tarde no hay problema para cenar. Platos típicos de asturias, de enormes proporciones... los tortos con huevos y chorizo, algo intensos para la cena.
  • Bar Folia, en los soportales de San Vicente. Raciones a buen precio. Estupendas las sardinas.
        

Comentarios

  1. Conocíamos algunos de los sitios que comentas pero sin enanos... Habrá q volver!! He leído de algunas casas rurales con mobiliario para niños fuera estupendas... No os alojaríais n alguna? Es q tenemos qvolver pero siendo 4 y dos monetes....creo q será más complicado ��

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  2. Hola, no conocemos ninguna casa rural por allí. Pero estoy segura que hay un montón de sitios estupendos. Hace diez años estuvimos en Peredo y Villa, cerca de Santillana del Mar. Pero era más un hotelito con encanto que un apartamento para ir con peques.

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